Cuando Laura nos encargó una tarta para el cumpleaños de su sobrino, le preguntamos que es lo que gustaba al peque y nos dijo que es un gran aficionado a la F1, y eso que Dídac cumplia tan solo 5 añitos.
Jordi se entusiamó con el encargo y se lo tomó como un reto personal, el tambien es un gran seguidor de la F1 y tengo que decir que lo vi disfrutar mucho haciendo el modelado del coche.
Y lo mejor de todo fué la llamada de Laura contándonos lo mucho que les había gustado y lo entusiasmado que estaba Dídac con su tarta-regalo.
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